¿Qué es la alergia y por qué nos afecta?

viernes, 3 de abril de 2015
Llega la primavera y con ellas las alergias. Ni Napoleón se salvaba de ellas aunque decía que era culpa de los gatos. Se equivocaba.

    La alergia se produce porque los leucocitos o también conocidos como glóbulos blancos intentan proteger al organismo de esa sustancia extraña que han detectado: el alérgeno

La alergia es una reacción exacerbada del sistema inmune a una sustancia que es inofensiva para la mayoría de la gente pero que en algunas personas concretas su organismo las considera sustancias extrañas. Esas sustancias extrañas consideradas por el organismo es lo que conocemos como alérgeno. Los alérgenos pueden producir síntomas más o menos molestos pero también podría incluso poner en riesgo la vida de algunas personas.

Desde el punto de vista de la biología, la alergia se produce porque los leucocitos o también conocidos como glóbulos blancos intentan proteger al organismo de esa sustancia extraña que han detectado, el alérgeno, y producen para ello anticuerpos. Estos anticuerpos son la inmunoglobulina E. La combinación del alérgeno con la inmunoglobulina E hace que se libere histamina desde unas células denominadas mastocitos.

Los mastocitos son células almacenadoras de histamina y que están localizadas en la mayoría de nuestros tejidos, sobre todo debajo de las superficies epiteliales como puede ser la piel o alrededor de los vasos sanguíneos.

A través de uno receptores específicos, la histamina puede aumentar la permeabilidad vascular. Esto es, puede facilitar la salida de líquido y proteínas desde la sangre hacia fuera de los vasos sanguíneos (lo que se conoce como espacio extracelular) y la consecuencia de ello es la aparición de edemas.

Es lógico que si pensamos en las alergias primaverales lo primero que nos venga a la memorias como alérgenos al polen de las flores  que brotan en esta época estacionaria del año. Sin embargo, los alérgenos están en otros lugares diferentes al polen. Por ejemplo, hay muchas personas que tienen alergias a algunos alimentos específicos y en concreto a sustancias particulares contenidas en ellos. Un ejemplo es a la lactosa de la leche o al gluten de los cereales. También hay personas que tienen alergia a los mariscos.

Tener alergia al marisco no supone necesariamente tener alergia al pescado, porque son alimentos distintos. Sin embargo, cada vez hay más casos documentados que personas que tienen alergia al marisco también tiene alergia a los ácaros del polvo. Hoy se empieza a conocer que mariscos y ácaros del polvo comparten una misma proteína, la tropomiosina, que actúa en nuestro organismo de alérgeno.

Es importante señalar que los alérgenos de los mariscos son glicoproteínas hidrosolubles y además son termoestables lo que hace que  cuando el marisco se cuece no se destruyen. Es decir, ni el marisco cocido pierde el alérgeno y además el agua en el que el marisco se cuece adquiere también este alérgeno. Esto es importante conocerlo porque muchas veces en nuestras casas o en restaurantes se utilizan, como caldos, agua donde se coció marisco para cocinar sopas o como base de arroces que automáticamente para las personas alérgicas a este tipo de alimento son fuente inagotable de alérgeno y producirán en ellas una reacción alérgica muy potente e igual a la que tendrían tomando el marisco. En España se estima que el marisco es responsable del  aproximadamente 8% de las alergias alimentarias.

¿De dónde proviene la palabra asma?

Como todos ustedes seguro conocen, el asma es una posible consecuencia de la alergia. El término asma es de origen griego, derivado de aazein o “exhalar jadeando con la boca abierta”.

El asma consiste en una inflamación crónica de la mucosa de los bronquios, por lo que se produce la contracción de sus paredes, lo que estrecha su calibre y dificulta el paso del aire. Este estrechamiento también se conoce como broncoespasmo.

Dice la historia que Napoleón Bonaparte era alérgico a los gatos. Al contrario de lo que se suele pensar, el causante de la alergia no es el pelo de los perros o gatos. Lo que produce alergia es la caspa, el polen o el polvo acumulados en el pelaje. Dicen los expertos que en los gatos, el alérgeno principal es el Fel D1 Parece que el gato Siberiano no contiene esta proteína.

Via teinteresa.es

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