Cómo los pensamientos negativos afectan a nuestro físico

lunes, 1 de febrero de 2016
Muchos dicen que somos lo que comemos. Sin embargo, en muchas ocasiones somos lo que pensamos. Y si no, ¿por qué las personas más negativas son más propensas a sufrir enfermedades? Nuestra mente tiene mucha fuerza y nuestra actitud es un factor determinante para nuestra salud. Explorar y entender cómo el pesimismo o el optimismo inclinan la balanza del bienestar general hacia un lado u otro es clave para llevar una vida sana y libre de enfermedades.

Bien es cierto que la mitad de nuestro carácter viene determinado por la genética, pero no podemos obviar que la otra mitad depende de nuestras experiencias vitales. Ser hostiles en un primer lugar o abrirse a las personas con una sonrisa desde el minuto cero dice mucho de nosotros/as mismos/as.

Y es esta actitud la que, ya desde la infancia y la adolescencia, nos marca el camino y asienta precedentes en la salud, favoreciendo factores de riesgo que en un futuro pueden evolucionar a enfermedades. Se sabe, por ejemplo, que los adolescentes más pesimistas tienen tendencia a fumar antes o al uso de drogas, y aquellos/as con más agresividad tienen la tensión mucho más alta que la media.

Algunos de los efectos que la negatividad ejerce sobre uno/a mismo/a

No podemos negar el hecho que el cerebro está conectado con todos y cada uno de los órganos de nuestro cuerpo mediante los sistemas endocrino y nervioso. No es de extrañar pues, que lo que pensamos y sentimos se transmite de forma casi directa al resto del cuerpo. Y no nos referimos únicamente al pesimismo, vinculado casi siempre a la depresión, sino también a la ansiedad, el estrés, el nerviosismo o cualquier trastorno de la mente, siempre de la mano de afectaciones en el plano físico.
Insomnio y trastornos del sueño

Es difícil conciliar el sueño cuando nuestra mente no deja de pensar en la reunión de mañana, en la bronca del jefe o en las facturas que hay encima de la mesa del comedor. Cuando estamos estresados y nerviosos, podemos sufrir muy fácilmente de insomnio y ver cómo pasan las horas sin que podamos dormir.

Esto implica que nuestro cuerpo no descansa lo suficiente, perdemos capacidad de concentración, podemos desarrollar fatiga crónica e irritabilidad. Además, al estar más débiles somos más propensos a padecer enfermedades.

Una de las mejores soluciones para esto, huyendo de los efectos secundarios o adversos, son las hierbas medicinales. Si echamos un ojo a este artículo sobre la valeriana http://www.hierbaspara.com/valeriana/ podemos ver como una sencilla infusión nos puede ayudar a relajarnos, tanto de día como de noche. ¿Qué mal nos puede hacer una planta?
Sobrepeso e hipertensión

Se ha demostrado en muchas ocasiones que el estrés y la ansiedad (habitualmente relacionados con pensamientos negativos) pueden conducir a malas conductas alimenticias que derivan en sobrepeso e hipertensión.

Ejemplos de este hecho los vemos continuamente, tanto en la vida real como en nuestro imaginario cinematográfico. Cuando alguien sufre una ruptura amorosa, se atiborra a helados. Cuando un equipo de fútbol pierde, los hinchas acuden en masa a comer comida basura. La comida grasienta, calórica y poco saludable resulta reconfortante en situaciones de baja estabilidad emocional. Podemos corroborar así que mantener una actitud positiva nos aleja de estos malos hábitos de vida.

Si ya es demasiado tarde, puedes probar con alguna dieta que se ajuste a tu estilo de vida y a tu cuerpo, como por ejemplo la dieta de la piña, muy bien explicada en http://www.comoperderpeso.es/dieta-de-la-pina/. Eso sí, siempre sin olvidarte de cambiar la actitud, que es la clave.
Infecciones oculares y otras manifestaciones físicas

Igual que sucede con los herpes, las infecciones oculares son uno de los claros reflejos de que algo no anda bien dentro de nuestro cuerpo. Ambos casos son el resultado, en ocasiones, de agentes víricos, pero muchas veces son fruto de una situación traumática, desagradable o estresante. ¿Y todavía crees que lo que sentimos y pensamos no afecta físicamente?

Para profundizar más en el tema de las infecciones oculares, y más concretamente en el orzuelo (uno de los efectos más comunes), os recomendamos echarle un vistazo a http://www.noticias-ciencia.com/el-orzuelo/, ya que explica en profundidad las causas, síntomas y remedios naturales contra esta afectación ocular.
¿Qué podemos hacer para cambiar?

Llegados a este punto puede que nos estemos replanteando nuestra actitud ante la vida. Y eso es bueno, porque no solamente disfrutaremos de paz mental y tranquilidad, sino que además nos encontraremos con más energía y salud que nunca.

Existen una gran variedad de técnicas y métodos para cambiar nuestra actitud, desde terapias alternativas como la meditación o la acupuntura hasta la consulta con un profesional como puede ser un psicólogo que nos dé ciertas pautas, o un psiquiatra que nos recete ciertos medicamentos para encontrarnos mejor.

Es evidente que no todas las técnicas sirven para todo el mundo, puesto que nadie nos conoce mejor que nosotros/as mismos/as, así que tendrás que descubrir qué es lo que te puede ayudar a cambiar tu estilo de vida hacia el positivismo.
Un pequeño truco: las nuevas tecnologías

Para ayudarnos con ello podemos aprovechar los avances tecnológicos. Sí, los mismos dispositivos que en ocasiones generan estrés pueden servirnos -si sabemos cómo usarlos- para conseguir nuestros objetivos. Es muy interesante darse un paseo por la web de aplicaciones móviles TuAppPara, ya que aparte de las apps móviles habituales encontramos muchas que nos ayudan a mejorar nuestro ánimo y estilo de vida. Por ejemplo, son muy útiles para generar una actitud más positiva y sana hacia la vida las aplicaciones para:

- Abandonar malos hábitos, siendo el más popular y uno de los más perjudiciales el del tabaco

- Seguir una alimentación más saludable

- Hacer deporte y ejercicio, que no solo mejora nuestra salud física, sino que mejora nuestro estado de ánimo

- Aliviar el estrés mediante juegos o actividades y hobbies que nos hagan disfrutar

- Tener todo nuestro trabajo y responsabilidades organizadas

- Conocer gente y entablar nuevas amistades y relaciones sanas

¿A qué esperas para el cambio?

Via madridiario.es

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